En diciembre de 2013 el Consejo de la Unión Europea aprobó la Directiva 2013/59/EURATOM que tiene por objeto establecer normas básicas de seguridad uniformes aplicables a la protección de la salud de las personas sometidas a exposición ocupacional, médica y poblacional frente a los riesgos derivados de las radiaciones ionizantes.
Esta directiva instaba a los Estados miembros a transponer lo dispuesto en ella en sus respectivas regulaciones nacionales en un plazo de 5 años. En España esta transposición se ha llevado a cabo en el sector de la edificación mediante el CTE y en el laboral mediante un reglamento pendiente de aprobación.